Pues si, Amy nos dejó ayer y yo, como gran fan de su música, no puedo evitar darle una pequeña despedida a mi manera. Desde que abrí mi blog siempre he querido hablar de esta magnífica cantante de vida tormentosa, pero estaba esperando a que al fin se publicase ese tercer disco tan anunciado, tan deseado y que, desgraciadamente, si se publica devolverá a Amy a la cima del mundo de la música tras haber muerto...
Una rebelde con chupete
Si algo caracterizó la infancia de Amy era lo mal que se le daban los libros, lo mucho que le gustaban los escenarios y las veces que le expulsaron del colegio.
Nacida el 14 de septiembre de 1983 en Londres en el seno de una familia judía, Amy creció influenciada por los gustos musicales de sus progenitores entre los que destacaba el jazz. Su padre terminó pegándole el gusto de cantar canciones de Sinatra a todas horas y al final la chiquilla descubrió que le iban más el teatro y la música que otra cosa. A los 10 años formó su propio grupo de música (llamado Sweet 'n' Sour) y a los 14 hizo su primera aparición televisiva.
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| La pequeña Amy |
La suerte se puso de su parte, al fin. A los 13 años le regalan su primera guitarra y empieza a componer canciones marcadas por los ritmos jazz y soul. El cantante Tyler James, amigo (o según fuentes exnovio) de Amy mandó una maqueta a un productor musical y, a la tierna edad de 16, Amy firmó su primer contrato discográfico.
Su primer disco, Frank, salió a la venta en octubre de 2003 y alcanzó un gran éxito de crítica. Por entonces Amy lucía así de sanota:
Éxito mundial y decadencia personal
Me gustaría no tener que añadir la segunda parte de la frase, pero lo cierto es que en esta época, para Amy una cosa acompañaba a la otra.
En 2005 empezaron sus problemas serios con las drogas. Según algunos medios, el motivo fue tan simple como las malas compañías de un novio maltratador y la depresión que sufrió tras la ruptura. Además, por esta época Amy pierde mucho peso debido a que sufre de transtornos alimenticios.
Para cuando su segundo álbum, Back to Black, se publica en 2006, Amy luce mucho más delgada que antes:
Sin embargo, su voz brilla tanto como en el anterior. La canción que le dió el éxito hablaba del intento de entrar en rehabilitación y su rechazo, pero el disco también destacó por otras canciones:
Pero a las buenas canciones les siguió la polémica. Amy salía más en las revistas por consumo de drogas o alcohol, las continuas peleas con su marido (de quien más tarde se divorció) o escándalos de diversa índole (como pasear desnuda por un hotel o dormirse en medio de un discurso del rey de los Zulúes...).
Cuando parecía que todo podía cambiar, Amy terminó dando un terrible concierto sólo 2 días después de dejar rehabilitación. Abucheada, decidió cancelar su gira europea. Esto pasó el pasado junio. Desde entonces, nada se sabe de ella hasta la desgraciada noticia de ayer...
Amy, estés donde estés, tus canciones siempre quedarán en nuestros corazones. DEP.
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