Como lo prometido es deuda, aquí estoy, orzuelo en el ojo izquierdo incluido, para hablaros de una peli que ví hace un par de noches. Se trata de "Hawking", una producción de la BBC que cuenta cómo fueron los primero años de Stephen Hawking tras conocer que padecía ELA (o enfermedad de Lou Gehrig).
Mi historia con esta película es larga. Hace como dos años o así que soy fan del actor protagonista, Benedict Cumberbatch, pero no tenía acceso a internet, así que no pude "investigar" su filmografía.
Hace cosa de un año o así, una compañera de clase (gracias Martita!!!) me habló de una peli que había visto en Antena 3 un finde por la tarde que iba sobre "ese señor de la silla de ruedas que habla por ordenador". Algunos compañeros más también la habían visto y me dijeron tantas cosas buenas que la apunté a mi lista.
Por falta de tiempo, no pude conseguirla hasta el verano y no la pude ver hasta que no empecé las vacaciones navideñas. Cuál fue mi sorpresa al ver quién la protagonizaba!!
Ahora, hablemos de la peli en sí. Como ya he dicho, nos cuenta los primeros dos años de lucha de Hawking contra el ELA (que para quien no lo sepa, es una enfermedad degenerativa de tipo neuromuscular por la cual unas células del sistema nervioso llamadas motoneuronas disminuyen gradualmente su funcionamiento y mueren, provocando una parálisis muscular progresiva de pronóstico mortal, pues lo normal es que quienes la pedecen, mueran en apenas 2 o 3 años). Además, Hawking se enfrenta a un sistema universitario un tanto firme en sus decisiones (incluso aunque sean erróneas), y al miedo que le produce su primer gran amor, pues es consciente de que muy probablemente morirá y no quiere dañar a la chica de sus sueños.
Mi opinión sobre la peli: se deja ver, en parte porque el actor protagonista (lo mejor con diferencia y del que seguro hablo más de una vez y muy pronto) hace mucho (interpretar a un personaje conocido nunca es fácil, menos aún si éste está vivo, añádele además una enfermedad que implica un transtorno físico de algún tipo). Eso sí, no esperéis un peliculón, porque no lo es. Cuenta la historia más o menos real de un personaje real y, muy a mi pesar, se nota que no es más que una peli de sobremesa diseñada para que el espectador llore (cosa que, conmigo consiguió, ya que el tema de la esclerosis y los discapacitados me toca muy de cerca).
Lo peor: no fui capaz de encontrarla en español (lo que no me supone un gran problema, pues prefiero ver las cosas en su idioma original) pero tampoco encontré los subtítulos y, como las ciencias no son lo mío, cada vez que hablaban de estrellas y todo eso, me perdía.
Feliz Navidad a tod@s!!!
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